miércoles, 19 de septiembre de 2012

Las Desventuras de Zonaja: Los ojos azules de nuestra Quadrophenia

Este mes fue algo muy diferente a lo que los meses de mi vida dictaminan.

Quizá sean cuestiones del organismo tratando de encontrar la superficie adecuada  para colgar el añejamiento que la botella carga, quizá fue cosa de que la espalda tiende a sentir un necio maldito cuando la levantas en son de un mañana demasiado vieja como para implicar un nuevo día o un recuerdo que por más pasos que se den en contra del colchón sigue teniendo un  resorte de calzón entumido como cordón umbilical atado a los sueños de la noche anterior hasta que el despertador mueve sus manecillas y configura una tijera que corta con su horario la modorra.

¡Buenos dias cariñito!

Me pregunto qué pasará cuando se me acaben las ideas para presentar una mañana como cualquier otra. aunque  de la que hablo tenga el gusto del recorrido del cd en el auto que camina a la oficina hasta los ojos del que lea.

Demasiado sábado y muy poca semana para evitar la llamada de un miércoles en el que una doña me extirpaba la ansiedad (como extraño esos miércoles de "hoy toca").

Por razones que no vienen al caso se clavó en el coche que manejo el disco de Quarophenia y desde entonces no puedo dejar un "I am the one" que se me ha atrincherado en la cabeza con sus propios "asegunes", claro, porque la neta es que el yoga no da para que me la mame a voluntad... Y es que antes de el re-afianzamiento de personal de la letra, hay un "every year is the same, and I'm feeling it again, I am a looser, no chance to win..." Y si le pican a lo azulito van  a escuchar una canción bien re-bonita del maese Townshend que dice algo así como "cada año es lo mismo, y lo estoy sintiendo otra vez. Soy un perderor y no tengo forma de ganar" y que de pronto dice también "I am the one", como diciendo... "si mi vida es de la chingada pero al final de cuentas, yo soy el bueno/único/chinguetas", porque finalmente todos somos el "bueno/único/chinguetas" de nuestra historia.

Desde que escribí la editorial pasada - que quizá no haya tenido mucha lectura (por cierto)-  me ha estado remordiendo la conciencia porque la verdad de las cosas, no soy adepto a las doctrinas de quienes dicen que el que hace algo "malo" lo hace porque es pendejo.  Si, así lo escribí, pero supongo que las cosas simplemente salieron como salieron porque en el flujo de palabras que integra lo que uno dice, a veces se apunta para lo que mejor suena aún y cuando tal cosa tenga poco que ver con lo que uno piensa.

Y es que ya que mi sesera está clavada en las letras del señor Townshend (si, si, el que escribió las óperas de un grupo ahí que nadie conoce y que por eso terminó llamándose "The who?") la verdad es que es difícil negar la veracidad de una línea que dice algo así como "why should i care if i have to cut my hair? I've got to move with the fashion or be outcast" y que se traduce como "¿por qué tendría que preocuparme por cortarme el pelo? Tengo que moverme con la moda o ser relegado".

A veces una conversación tiende a irse por terrenos que no son los nuestros simple y sencillamente porque los ajenos evitan las minas de agresión que ciertas palabras en la conversación traen consigo y así, por más que uno quiera ser el "chinguetas" de su vida, termina siendo, al menos en el episodio que pasa, el Chewbacca de un Han Solo al que no quisimos hacer enojar.

De pronto se encuentra uno hablando con su jefe y opta por darle la razón porque igual no gana nada con el antagonismo o ¿cómo negarlo? quiere uno tener una noche de cogimiento tranquila y prefiere decir que la canción que oyeron con la/el de la promesa es "romántica" para procurarse las carnes de la noche aunque en el fondo se haya sentido uno como con un dildo en las orejas porque quien manejo los discos pensó erótico escuchar... No sé, alguna de esas cosas que hacen que uno sienta el forcejeo de un dildo con estoperoles en el tímpano (pero era eso o cojerse a una lata rellena de bisteces). De pronto escribe uno algo sólo para que se lea bonito...

Sé que se leyó "bien" en la última editorial, pero la verdad es que no creo que uno haga cosas que puedan considerarse "malas" sólo porque se es pendejo, la verdad es que creo que la razón de lo que llamamos "malo" es lo que la real academia de la lengua española define como "cualidad de prepotente", osease del que "es más poderoso que otros" o "abusa de su poder", el que puede hacer las cosas por la simple razón de poder hacerlo.

Cualidad de la mañana con manos de tijera, del jefe, del posible amante para el ganoso...

O del que escribe.

Me van a perdonar, pero sinceramente creo que una de las cualidades/defectos que tenemos por el hecho de poder leer estas líneas, va de la mano con el hecho de poder escribirlas. Se lee porque se puede, se escribe porque se puede y ahí, creo radica una de las más fuertes cuestiones que me han pegado en los últimos días.

Si, el "mal" es consecuencia de la prepotencia, pero... Igual lo es el escribir algo para que los demás lo lean, igual es pintar algo para que alguien lo vea, igual es tener un hijo para... Para... Mmmmmta, y ahora si no está el pinche tío para hacer sus preguntas pendejas, pero el punto es que el imperativo creativo del ser humano también deviene del "no maaaas", ese que que nos sale cuando nos preguntan "¿por qué lo hiciste?", ese que en realidad quiere decir "pus porque pude".

Se ha discutido mucho si en realidad "es bueno" o al menos "no es malo" el poder clonar seres humanos cuando aparentemente tenemos la tecnología para hacerlo, se ha discutido hasta el cansancio si debíamos partir al átomo sólo porque encontramos la forma de hacerlo a pesar de que el hacerlo pueda llevar a crear armas que borran poblaciones enteras del mapa, sin embargo, lo hemos hecho.

El 6 de agosto de este año llegamos a marte porque simple y sencillamente quisimos saber si podíamos.... Y pudimos... ¿Eso es "malo"?

Si eso fuera cierto, entonces tendríamos que llegar a la conclusión de que un ser como el humano, por el hecho de tener la capacidad de ser "prepotente" y hacer las cosas simplemente porque puede, sería intrínsecamente malo y la verdad, no todos tenemos ojos azules.

Nota: "behind blue eyes", la canción que aparece cuando le pican ahí en el azul de donde dice "ojos azules" es también de "The Who",  sólo que no es de Quadrophenia.